Es Septiembre del 2020, y después de un confinamiento que nos separó tanto tiempo de nuestras escapadas moteras la ruta se pillaba con ganas. La ruta elegida fue de Salamanca a Plasencia por la Sierra de Gredos y la comarca de La Vera y al dia siguiente volver a Salamanca por el valle del Jerte y la Sierra de Francia, dedicando el primer y último día a llegar a Salamanca desde los dos puntos de partida, Coruña y Madrid.
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Una ruta de jueves a domingo a la que este año se apuntaron Marco, Fran, Jorge y José desde Coruña y Sera y Enrique desde Madrid. Más tarde, el Sábado se intentarían unir desde Coruña Jose Manuel y Felipe, pero por una avería tuvieron que desistir y volver a casa.
Como cada año la ruta comienza buscando un punto de encuentro entre los miembros de Coruña y los de Madrid. Este año el elegido es Benavente, quedando en esta localidad zamorana para comer.
Dia 1 – Salamanca
Desde Coruña reunión en el bar O Seixal con los deberes hechos, alguno llega tarde… En realidad habíamos quedado en la bodeguilla de San Pedro, sitio motero por excelencia, pero estaba cerrado. Salimos tarde, como siempre, enfilando N-VI dirección Madrid.
Desde Madrid y dada la distancia a recorrer optamos por avanzar rápidamente por la A6 pasando el túnel de Guadarrama y abandonándola en Villacastín para dirigirnos por la N-601 hasta Olmedo, Tordesillas y, finalmente Benavente. Elegimos carreteras comarcales que nos hacen disfrutar de la conducción y del paisaje dado el poco tráfico que existe en estas vías, aunque eso sí las curvas las dejaremos para más adelante puesto que en algunos tramos la carrera es esa linea recta que une los puntos, en este caso los pueblos.
Después del reencuentro con los compañeros, de comer y de llenar los depósitos nos ponemos en ruta hacia Salamanca pasando por la Reserva natural de Lagunas de Villafáfila dirección Toro donde hacemos un pequeño avituallamiento en su centro histórico y recordando batallitas de la ruta del 2016.
Conviene recordar que Toro es tierra de vinos con lo que nos acompañan en la travesía los viñedos cargados con la tinta de Toro puesto que estamos en Septiembre, muy cerca de la vendimia.
Seguimos avanzando, ya con un poco de prisa puesto que empieza a atardecer, dejando atrás Fuetesauco y adentrándonos en tierras charras por la comarca de la Armuña, donde nos encontramos con inmensas rectas rodeadas de campos de cereal. Sobre las 21:00 llegamos al Hotel Alameda Palace, en Salamanca, que será nuestro hospedaje esta primera noche. No sin antes visitar el centro de la ciudad, cenar y tomar una copa en una de las muchas terrazas que en verano alegran la ciudad.
Día 2 Sierra de Gredos – Plasencia
El segundo día salimos camino de Alba de Tormes con la intención de llegar a Piedrahita y afrontar el comienzo de la Sierra de Gredos por el puerto de Peñanegra. Según vamos llegando descubrimos que la subida va a ser divertida puesto que Piedrahita se halla al pie de la montaña. No nos decepciona porque son 15 kilómetros de subida con vistas espectaculares y un trazado bastante divertido. Por si fuera poco, y para nuestra sorpresa, el mirador del puerto nos espera con un pequeño bar para disfrutar de las vistas como dios manda, con Estrella.
Seguimos camino adentrándonos en la Sierra de Gredos pasando por algunos de los pueblos más característicos de esta zona: Navacepeda de Tormes, Hoyos del espino, Navarredonda o San Martín del Pimpollar, por una carretera de doble sentido, con curvas suaves muy bien asfaltada y señalizada. Esta carretera nos lleva sin remisión a nuestra parada para comer, en el cruce de esta carretera con la N-502 que une Ávila con Toledo.
Venta Rasquilla no nos decepciona, la presencia de varios grupos de motos aparcadas en la puerta vaticina que la recomendación que nos habían hecho no se equivocaba. Patatas revolconas, carnes y vino de la tierra así lo confirman.
Continuamos camino hacia Arenas de San Pedro, haciendo parada en el mirador del Puerto del Pico para disfrutar de sus vistas y de la calzada romana que lo atraviesa. Hacemos un pequeño desvío para visitar a unos grandes amigos en Villarejo del Valle, otro de los maravillosos pueblos que se asientan al pie del puerto del Pico.
La ruta nos sigue llevando por tierras de Ávila, por pueblos como Arenas, Poyales del Hoyo o Candeleda. Seguidamente nos adentrándonos en Extremadura comenzando así nuestro periplo por la comarca de La Vera, pasando por pueblos como Madrigal, Villanueva, Valverde, Losar o Jarandilla, todos de La Vera claro. La carretera recorre todos esto pueblos y atraviesa varias de las gargantas mas conocidas de la zona, pero como es verano apenas bajan con agua.
En Cuacos de Yuste nos desviamos hacia el Monasterio del mismo nombre y continuamos por esta carretera de montaña hacia Garganta de La Olla, donde el calor acumulado del viaje invita a darse un baño a algún valiente en las piscinas naturales de las Pilatillas, muy cerca del pueblo.
El hecho de que son más de las ocho de la tarde, la distancia con Plasencia y la necesidad de llegar pronto al hotel, nos hace desestimar el plan inicial de pasarnos al Jerte por Piornal y decidimos seguir por la carretera nacional hasta Plasencia para llegar antes.
El hambre y una ducha reparadora hace que disfrutemos de la cena, las copas y de la noche de esta bella localidad extremeña.
Día 3 Plasencia – Salamanca
Tercer día de ruta y, como el resto de los días, el tiempo que nos acompaña es espectacular. Es Sábado y lo vamos a notar puesto que nos vamos a encontrar con multitud de grupos moteros disfrutando del fin de semana. El día comienza adentrándonos en el Valle de Jerte hasta Cabezuela del valle donde nos desviaremos por el puerto de Honduras para llegar a Hervás. Las vistas desde el puerto son increíbles tanto del lado del Jerte como hacia Hervás y la carretera para disfrutarla tanto en la subida como en la bajada, calzada en buen estado y curvas exigentes que nos hacen gozar de la moto.
La parada en Hervás es obligatoria, y dada las horas del medio día que vienen siendo aprovechamos para comer y definir la ruta hacia La Alberca, rozando Las Hurdes y atravesando el parque nacional de Las Batuecas.
De vuelta a la carretera el calor es extremo y el paso por Zarza de Granadilla hasta La Pesga nos hace atravesar el embalse de Gabriel y Galán y su zona de baño por lo que, como era evidente, no desperdiciamos el momento para darnos un baño en el pantano. Sublime dijeron algunos.
El camino nos lleva por una mezcla de tramos de rectas interminables y zonas de curvas suaves fáciles de gestionar hasta que llegamos a Las Mestas, donde nos desviamos de la carretera principal para llegar a La Alberca por Las Batuecas. Al menos esa era la teoría ya que aquí, el que suscribe, que iba el último del grupo se pasó el desvío y siguió él sólo por Sotoserrano hasta La Alberca. Un pequeño rodeo en distancia pero no en tiempo porque la carretera era bastante mejor. Quizá algún día Jorge os obsequie con algún post de ese paso por Las Mestas.
La Alberca, como todos los pueblos de la sierra de Francia, es digna de ver, por lo que dedicamos un buen tiempo a recorrerla y saborearla.
Ya casi de noche salimos con dirección a Salamanca atravesando el Campo Charro y llegando al Mismo Hotel Alameda Palace del día anterior. Sábado por la noche en Salamanca, qué decir…. pues poco o nada… recordad: 2020, pandemia. Resumiendo cena rapidita y al hotel.
Día 4 Cerdos Salvajes Go home
Después del desayuno preparamos las maletas, nos despedimos y comenzamos la vuelta a casa, para unos más larga, los gallegos y para otros más sencilla, los madrileños.
Como otros años la ruta fue magnífica, sin incidentes graves que reseñar y con grandes recuerdos para plasmar en un post como este. Y por supuesto con muchas ganas de preparar la ruta del 2021.
Muy buena ruta ; recomendable 100 x 100.
Hemos ido 2 amigos siguiendo el itinerario y sólo cambiando los sitios d comida por horarios.
Gracias
¡Nos alegramos de haber sido útiles! A ver si en alguna ruta coincidimos ✌️✌️✌️ ¡¡RAFAGAS!!